Es cierto el hecho de que, en general, en las escuelas actualmente no se enseña “creatividad”. Yo pensaba que era una cualidad innata y que no podía ser aprendida, y quizá este sea el sentir general de la sociedad.


Educar en la creatividad hace que los individuos se enriquezcan de aspectos positivos como por ejemplo la confianza o la iniciativa. Por ello deberíamos replantearnos el sistema educativo actual, más partidario de currículos cerrados.


Por otro lado, el término Mindfulness fue creado en 1979 por el doctor Kabat Zinn y se traduce literalmente como "Atención plena". El Mindfulness  suscribe técnicas consistentes en la relajación y concentración, de forma que se consiga la plena atención de los alumnos en el aula. Con la plena atención de los alumnos conseguimos el mejor entendimiento de la materia impartida, así como un buen clima en el aula.


Todo lo expuesto, está relacionado con lo que explicó Punset en el programa Redes que se centraba en unas jornadas sobre educación en otoños de 2009 en Washington -enlace al mismo-. Los diversos profesionales estaban de acuerdo que era necesario un espacio y tiempo para que los alumnos pudieran meditar, incluso se proponía un Peace Corner, donde pudiesen reflexionar y resolver sus diferencias.


Se ha probado que los alumnos con los que se aplican estas técnicas tienen mejores resultados académicos. Además también es importante educarlos en inteligencia emocional de forma que sepan cómo gestionar sus emociones, y que sepan empatizar con el resto. De esta forma, educaremos individuos felices, y personas que sepan gestionar los conflictos.


Si conseguimos introducir todos  los conceptos aprendidos en el currículo actual, seremos capaces de crear un mejor clima en el aula a la vez que conseguir mejores actitudes tanto en alumnos como en profesores.